Puede dar lugar a la hipertensión, principal factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, que generan a su vez muertes súbitas y prematuras.
Sabías que exagerar con el consumo de sal puede traer graves consecuencias al organismo. Se recomienda que la ración diaria de sodio (sal) sea de hasta 5 gramos, pero sin embargo, la población consume tres veces más de lo permitido, entre 12 a 15 gramos.
La ingesta desmesurada de sal en las comidas, además de favorecer al incremento de la presión arterial (factor de riesgo para enfermedades cardiovasculares) puede incluso generar osteoporosis, insuficiencia renal, gastritis, en este último caso facilitar el desarrollo de cáncer de estómago.
Puede generar asimismo, retención de líquido en el cuerpo, produciendo aumento de peso corporal, facilitar la formación de cálculos o piedras a nivel renal. En los asmáticos la sal hace que aumente la crisis de asma.
Los embutidos, quesos duros, productos enlatados, panificados y la salsa de soja contienen una cantidad importante, por lo que aconseja elegir productos con menor porcentaje de sodio.
La disminución de sal en las comidas debe iniciarse desde la niñez, a fin de impedir la aparición de enfermedades en la edad adulta.
Para disminuir el consumo de este mineral recomienda:
1) Elegir productos frescos: frutas y verduras;
2) Colocar la sal recién al finalizar la cocción de los alimentos.
3) No colocar saleros en la mesa para evitar agregados innecesarios de sodio.
4) Hacer uso de condimentos naturales como albahaca y limón.