Atención: nada de pantallas a niños en los primeros 2 años de vida

  • Recomienda la Organización Mundial de la Salud. En otros grupos de edades, el límite de uso va de una a dos horas.
  • Problemas de salud como obesidad, retrasos en el lenguaje y el desarrollo cognitivo, irritabilidad y otros trastornos de conducta son algunos riesgos en que puede derivar.
  • Compartimos las consecuencias del uso excesivo y normas para que los padres orienten a sus hijos (niños y adolescentes) en el uso responsable de medios electrónicos.

Las pantallas (celulares, tablet, computadoras) representan en la actualidad una herramienta de comunicación ultrarrápida y universal por donde pueden transmitirse material de contenido múltiple, de calidad variada y duración indeterminada.

Considerando estas características, se recomienda en el caso de los niños y adolescentes que el uso sea con el objetivo principalmente educativo para reforzar el aprendizaje cognitivo y favorezca así, el adecuado desarrollo social de estas franjas etarias, representando para los padres y tutores un verdadero reto para controlar el tiempo que un niño pasa frente a un a pantalla, los problemas desencadenados por el uso excesivo, y la exposición a contenidos no adecuados.

La sobreexposición al uso de pantallas puede conducir a varios problemas de salud como, el aumento de peso, generando diferentes grados de obesidad desde edades tempranas, déficit de sueño reparador en tiempo y calidad, trastornos de conducta con irritabilidad, decaimiento, retrasos en el desarrollo del lenguaje y cognitivo que conducen al bajo rendimiento escolar, déficit de atención y trastornos emocionales como adicciones y problemas de autoestima.

El tiempo de exposición a pantallas restringe. asimismo, el movimiento y más aún el desplazamiento de los niños y adolescentes incrementando así el comportamiento sedentario, por lo que es considerado un factor de riesgo que favorece la aparición y desarrollo de las enfermedades no transmisibles más prevalentes como la obesidad, diabetes mellitus Tipo 2 y afecciones circulatorias cardiacas.

Es importante alentar a la práctica de actividades lúdicas y deportivas adecuadas a las capacidades y edades de los niños y adolescentes.

Importancia del juego para el desarrollo del cerebro

Es importante destacar, que la ventaja del tiempo de juego no estructurado es más valiosa para el desarrollo del cerebro de un niño pequeño que los medios electrónicos.

Los niños menores de 2 años tienen más posibilidades de aprender cuando interactúan y juegan con sus padres, hermanos, así como con otros niños y adultos.

Tiempo recomendado para el uso de pantallas

La Organización Mundial de la Salud (2019 y 2020) recomienda que:

  • Niños Menores de 2 años:      Nada de pantallas
  • De 2 a 4 años                      :      Hasta una hora (60 minutos)
  • De 5 -17 años                      :     No pasar dos horas (120 minutos)

Consejos útiles para un uso inteligente de pantallas:

  1. La exposición a las pantallas debe ser vigilada por los padres cuidando el tiempo y contenido en función a la edad y comprensión del niño para que sea un factor positivo en su desarrollo físico, cognitivo, emocional y social.
  2. Los padres deben hacer énfasis en la selección de los programas para que tengan alta calidad educativa y con acompañamiento de dialogo familiar.
  3. Fortalecer las sesiones de lectura comprensiva, tiempos recreativos al aire libre y la iniciación de actividades deportivos de su elección para mantener la adherencia al mismo.
  4. Las pantallas no deben acompañar a las familias durante el rato de la comida/cena, ni durante el tiempo dedicado a las actividades extraescolares o al estudio.
  5. Evitar su uso dos horas antes de dormir.
  6. Explicar a los niños desde pequeños, las consecuencias de un uso excesivo y las normas para un uso responsable y sin riesgo: no dar datos personales, no quedar con desconocidos, no introducir datos bancarios, emplear lenguaje correcto.
  7. Los padres y cuidadores deben dar ejemplo a los más pequeños y tratar en lo posible de no usar pantallas en el tiempo dedicado a la familia y tareas de la casa.