Otoño o Araroguekúi en nuestro dulce idioma guaraní, es la temporada de mandarinas. Esta fruta cítrica, ligeramente ácida y muy dulce, de agradable aspecto y aroma se recomienda consumirla regularmente, en especial en esta época del año por los múltiples beneficios nutricionales y medicinales que otorga al organismo para contrarrestar los embates del frío y el padecimiento de enfermedades infecciosas.
Esta fruta se destaca por su elevada concentración de agua en un 90% y de Vitamina C. También posee otras vitaminas, la A, B1 y B2, así como sales minerales, potasio y ácido fólico. Es rica en fibras, con bajo nivel de azúcar, reducido contenido de grasa y calorías, lo que la hace apta incluso para la pérdida de peso. Es una fruta diurética; junto con las vitaminas y sales minerales que posee, colabora para el tratamiento de las anemias.
El 2021 fue declarado “Año internacional de las frutas y verduras” por la Organización de las Naciones Unidas – ONU, con el objetivo de concienciar sobre la importancia de estos alimentos para la nutrición humana, la seguridad alimentaria y la salud. En este contexto, desde la Dirección de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles, la Lic. Claralina Mendoza, nutricionista y encargada de Alimentación Saludable, señala los beneficios, las propiedades y el valor nutricional que posee esta excelente fruta de estación, la mandarina.
BENEFICIOS
• Se destaca por contribuir al control del peso corporal, ya que otorga una mayor saciedad.
• Ayuda a equilibrar el nivel de azúcar en la sangre.
• Baja en calorías, constituye una aliada perfecta para las dietas balanceadas de pérdida de peso.
• Reduce la producción de cortisol, la hormona del estrés, que puede influir en el almacenamiento de grasa corporal.
• Alta concentración de vitamina C.
• Contiene, además, vitaminas A, B1 y B2
• Flavonoides.
PROPIEDADES
• Antioxidantes.
• Previene el daño causado por los radicales libres.
• Refuerza el sistema inmunitario, por lo que reduce el riesgo de padecer enfermedades infecciosas.
• Ayuda al cuerpo a sintetizar el colágeno, mejorando la curación de las heridas de la piel.
• Antiseptica.
• Antiviral.
• Rica en potasio, sustancia que reduce la presión arterial y promueve un flujo sanguíneo más sano, previniendo la formación de coágulos sanguíneos.
• Ayuda en la prevención del exceso de grasa en nuestro cuerpo, principalmente en el hígado
• Ayuda a bajar el colesterol malo y promueve el buen colesterol.
• Propiedades anticancerígenas de los bioflavonoides encontrados en la mandarina.
• Ayuda a prevenir el aumento de las células cancerígenas, reduciendo así la proliferación de tumores.
• Ayuda en la digestión y combate problemas relacionados con el sistema digestivo
• Mejora el sistema renal.
• Tiene 90% de agua, por lo que ayuda a hidratar el organismo. Es una fruta diurética y sus vitaminas y sales minerales colaboran para el tratamiento de las anemias.
• Beneficiosa para la vista. Ayuda a prevenir la degeneración macular relacionada con la edad, que puede ser la mayor causa de pérdida de visión en edad avanzada.
• Recomendada para los deportistas.
• Posee alrededor de 166 mg de potasio por cada 100 gramos.
• Sinterizador del colágeno en el cuerpo, ayuda a mantener tendones, ligamentos, huesos y arterias bien unidos.
• Asimila el hierro. El déficit de hierro en la sangre puede causar falta de energía y dejar a las personas más pálidas y cansadas. Cuando la vitamina C de la mandarina se consume junto con algún otro alimento rico en hierro, como por ejemplo la espinaca, el cuerpo tendrá una capacidad mayor de absorber este hierro.
VALOR NUTRICIONAL POR 100 GRAMOS DE MANDARINA
Energía: 53 kcal
Carbohidratos: 13.34 g
• Azúcares: 10.58 g
• Fibra alimentaria: 1.18 g
Grasas 0.31 g
• saturadas 0.039 g
• trans 0.00 g
• monoinsaturadas 0.06 g
• poliinsaturadas 0.065 g
Proteínas: 0.81 g
Agua: 85.17 g
Retinol (vit. A): 34 mg (4%)
Tiamina (vit. B1): 0.058 mg (4%)
Otoño o Araroguekúi en nuestro dulce idioma guaraní, es la temporada de mandarinas. Esta fruta cítrica, ligeramente ácida y muy dulce, de agradable aspecto y aroma se recomienda consumirla regularmente, en especial en esta época del año por los múltiples beneficios nutricionales y medicinales que otorga al organismo para contrarrestar los embates del frío y el padecimiento de enfermedades infecciosas.
Esta fruta se destaca por su elevada concentración de agua en un 90% y de Vitamina C. También posee otras vitaminas, la A, B1 y B2, así como sales minerales, potasio y ácido fólico. Es rica en fibras, con bajo nivel de azúcar, reducido contenido de grasa y calorías, lo que la hace apta incluso para la pérdida de peso. Es una fruta diurética; junto con las vitaminas y sales minerales que posee, colabora para el tratamiento de las anemias.
El 2021 fue declarado “Año internacional de las frutas y verduras” por la Organización de las Naciones Unidas – ONU, con el objetivo de concienciar sobre la importancia de estos alimentos para la nutrición humana, la seguridad alimentaria y la salud. En este contexto, desde la Dirección de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles, la Lic. Claralina Mendoza, nutricionista y encargada de Alimentación Saludable, señala los beneficios, las propiedades y el valor nutricional que posee esta excelente fruta de estación, la mandarina.
BENEFICIOS
• Se destaca por contribuir al control del peso corporal, ya que otorga una mayor saciedad.
• Ayuda a equilibrar el nivel de azúcar en la sangre.
• Baja en calorías, constituye una aliada perfecta para las dietas balanceadas de pérdida de peso.
• Reduce la producción de cortisol, la hormona del estrés, que puede influir en el almacenamiento de grasa corporal.
• Alta concentración de vitamina C.
• Contiene, además, vitaminas A, B1 y B2
• Flavonoides.
PROPIEDADES
• Antioxidantes.
• Previene el daño causado por los radicales libres.
• Refuerza el sistema inmunitario, por lo que reduce el riesgo de padecer enfermedades infecciosas.
• Ayuda al cuerpo a sintetizar el colágeno, mejorando la curación de las heridas de la piel.
• Antiseptica.
• Antiviral.
• Rica en potasio, sustancia que reduce la presión arterial y promueve un flujo sanguíneo más sano, previniendo la formación de coágulos sanguíneos.
• Ayuda en la prevención del exceso de grasa en nuestro cuerpo, principalmente en el hígado
• Ayuda a bajar el colesterol malo y promueve el buen colesterol.
• Propiedades anticancerígenas de los bioflavonoides encontrados en la mandarina.
• Ayuda a prevenir el aumento de las células cancerígenas, reduciendo así la proliferación de tumores.
• Ayuda en la digestión y combate problemas relacionados con el sistema digestivo
• Mejora el sistema renal.
• Tiene 90% de agua, por lo que ayuda a hidratar el organismo. Es una fruta diurética y sus vitaminas y sales minerales colaboran para el tratamiento de las anemias.
• Beneficiosa para la vista. Ayuda a prevenir la degeneración macular relacionada con la edad, que puede ser la mayor causa de pérdida de visión en edad avanzada.
• Recomendada para los deportistas.
• Posee alrededor de 166 mg de potasio por cada 100 gramos.
• Sinterizador del colágeno en el cuerpo, ayuda a mantener tendones, ligamentos, huesos y arterias bien unidos.
• Asimila el hierro. El déficit de hierro en la sangre puede causar falta de energía y dejar a las personas más pálidas y cansadas. Cuando la vitamina C de la mandarina se consume junto con algún otro alimento rico en hierro, como por ejemplo la espinaca, el cuerpo tendrá una capacidad mayor de absorber este hierro.
VALOR NUTRICIONAL POR 100 GRAMOS DE MANDARINA
Energía: 53 kcal
Carbohidratos: 13.34 g
• Azúcares: 10.58 g
• Fibra alimentaria: 1.18 g
Grasas 0.31 g
• saturadas 0.039 g
• trans 0.00 g
• monoinsaturadas 0.06 g
• poliinsaturadas 0.065 g
Proteínas: 0.81 g
Agua: 85.17 g
Retinol (vit. A): 34 mg (4%)
Tiamina (vit. B1): 0.058 mg (4%)